LA LLEGADA DEL ESPÍRITU SANTO, PENIEL
SOBRE MARIA
Se entristeció mucho, y dudo de lo que hasta ahora había sido su esperanza de escapar de un destino que no quería, y se pregunto: ¿Entonces los sueños, el ángel que pasaba con eso? ¿Le había mentido? ¡Si claro! ¿Como podía ella ser tan ilusa de haber creído que entre tanto doctor de la ley consagrado, el Señor se iba a fijar en ella? una humilde muchacha pobre, e insignificante, esos eran sus pensamientos y lloraba con mucho dolor entristecida, hasta que de pronto ¡Alguien le hablaba! y ya no era en sueños, era como si alguien invisible estuviera ahí a su lado, hablándole y ella lo podía oír, pero no lo podía ver.
Y decidió no escuchar por temor, hasta que no pudo más ya que era mucho el asedio de aquella Vos, aquel Ángel que no era más que Peniel, o el que había sido probado en la tierra siendo el Rey David, le dijo:
-Hola dulce María, vengo de parte del Dios altísimo, he venido para guiarte y enseñarte, lo que debes hacer.-
Así empezó una nueva vida para María, platicaba con ese ser que solo ella podía escuchar, ya no estaba sola, y tuvo la intención de ir con aquellos conocedores de la ley, pero ¡Pensarían que estaba loca!
Los meses empezaron a transcurrir, hasta que aquel enviado de Dios, le dijo:
-María acompáñame, vamos a las afueras del pueblo- ella obedeció y fue. Era la hora que pasaban los soldados romanos al pueblo y estando ahí, el Ángel le dijo a María:
- Quita el velo de tu cabello y rostro- y ella se asusto, porque usar velo era un hábito, pero obedeció y quito su velo justo cuando pasaban los soldados muy de prisa, pero, en los últimos estaba el destinado, uno al cual el Creador ya había enviado de acuerdo al plan de Jesuoh.
Aquel soldado, se detuvo al verla, era extraño en aquellos lugares ver a una mujer sin velo, y la contemplo -¡Realmente era hermosa!- Pensó, y siguió su camino, María por su parte no entendía pero obedecía al Ángel que la guiaba.
Así aquel Ángel, guió a María a repetir en diferentes ocasiones aquello, hasta que por fin aquel varón, bajo de su caballo, se acerco y le dijo:
¿Cuál es tu nombre?- y ella le dijo:
-María- aquel hombre era muy atractivo, de ojos azules y cabello rubio, María se enamoro desde ese momento, y también aquel varón cuyo nombre era Publio, que no era otro, que Eiden nuevamente en la tierra, para encontrarse con Marìa o Eva, la princesa Daynara.
Así es, El Creador sabía, que los indicados para traer a aquel que daría la Salvación eran los mismos del principio, Eva y Eiden. Los Irkans desobedientes, también estarían cerca nuevamente de ellos, porque se les estaba otorgando la oportunidad, de hacer bien su trabajo, cuidar a Ivi y a Eiden.
El Creador los puso muy cerca, como a Miguel quien fue el que estuvo en la puerta del Jardín de Eiden. Y además el que encabezo la batalla contra los rebeldes en el cielo, hasta salir vencedor, sin duda era el mejor y el principal, sería el, quien estaría a cargo de cuidar a los hijos del Creador, Daynara y el que llegaría “JESUOH”, el hijo amoroso que quería salvar a sus hermanos de las tinieblas. Era la oportunidad de Miguel de redimirse de las fallas anteriores y alcanzar perdón y este, en cuanto a la carne era descendiente directo del rey David, y su nombre terrenal JOSE quien había sido movido a misericordia para desposar a María.
“María y Publio”, o Eva y Eiden, empezaron un gran romance, aquel amor había atravesado barreras de tiempo y se amaron intensamente, hasta que María “CONSIBIO” tal como el Creador lo mando desde el principio, cuando Adán conoció a Eva y concibieron a Caín, o a Kein.
Fue así, como el cuerpo que utilizaría en la tierra Jesuoh empezó a formarse en aquel vientre de la cual espiritualmente era su hermana, ella lo trasladaría a la tierra, sin saber que el, venía a salvarla, y se empezó a formar Jesús, en el vientre de María, “de carne y sangre” todo iba bien, cuando María supo su estado, aquel Ángel que guiaba a María, el Espíritu del Santo llamado: PENIEL, o rostro de Dios, le dijo:
-Comunícale a Publio que estas en cinta-. Aquel enviado ya le había aclarado a María que ella era la indicada para guiar a Publio, a la obediencia al Creador, ya que en esa vida Eiden no conocía a su Señor, o más bien no lo recordaba, al igual que María, pero María tenía la ley del Creador en su corazón, por que había crecido cerca de sacerdotes.
Pero María hasta ese tiempo no había obedecido, por temor a perder a Publio, ya que ella lo veía como su salvación, para poder escapar del destino que le estaba preparado al lado de un hombre que no amaba.
De acuerdo a la ley, desde que estaban comprometidos, se consideraba adulterio, tener otro compañero que no fuera su prometido y María siguió aquel adulterio, hasta que los planes del Creador tomaran el cause planeado por Jesuoh. En ese tiempo a Publio le giraron una orden de salir a una misión, por que eran tiempos de violencia, y el fue a María y se lo comunicó.
El plan de Publio, era llevarse a Roma a María y ahí nacería su hijo, y serían felices, Y Marìa creía que esa era la voluntad del Creador, y que Publio sería quien cuidaría a su hijo, como se lo habían anunciado, su esperanza había florecido nuevamente, puesto que el espíritu del Santo la guiaba, más sus planes no llegarían a cumplirse.
Aquel día Publio le dijo a María:
-Maria me llaman y es mi deber ir, pero no olvides que te amo y que volveré por ti y nos iremos a Roma, solo espérame, la misión a la que me envían, no durara mucho y volveré-
María tuvo miedo y lloro, pidiéndole que no la dejara en esos momentos y que si eso no era posible que la llevara con el, pero el le explico que no era lo correcto, el volvería y se irían a Roma y ella sería su esposa, María guiada por el Espíritu Santo le dijo:
-Publio estoy en cinta y tengo miedo de no verte más- Publio se puso feliz y le dijo:
-Ahora con más razón volveré, mi hijo me nesecita y tú también, yo regresaré- y en su euforia y deseo de convencer a María de su amor, hablo a la ligera y exclamo:
¡Ni siquiera tu Dios podría separarnos!
¡Pobre Publio, por no conocer al Dios de María, hablo muy a la ligera! Y María al escuchar esas palabras se estremeció en su corazón, por que ella si tenía conocimiento de quien era su Dios, más sin embargo, pudo más el temor de perder al amor de su vida, que “No honro a su Padre”.
El deber de María era guiar a Publio no desviarlo, y ella sabiendo que había fallado en el mandato, que le dieron, “guiar a Publio al Creador” se guardo su temor y trato de hacer como si nada hubiese pasado.
Pero el Creador había escuchado aquello a través de su Ángel, o el Santo que la guiaba y el no pasaría por alto aquella desobediencia, por que estaba siendo probada. Publio se marcho, y mientras Marìa esperaba día con día a su amado, a la misma hora y en el mismo lugar, en su vientre, aquel pequeño crecía y pronto, no podría ocultarlo.
Su amado no volvería, por que entrego el cuerpo en esa revuelta, a la que había sido enviado y antes de expirar, en sus labios había un nombre, “María” y un pensamiento que lo angustiaba “Su hijo” lo necesitaban ambos, pero el no volvería, y ahí, antes de entregar el espíritu para abandonar aquel cuerpo, le dio a un compañero un mensaje que jamás llegaría a su destino, o al menos en ese tiempo, le dijo:
-Busca a María, dile lo que pasó y lo mucho que la amo, a ella y a mi hijo- y antes de entregar el espíritu, exclamo:
-¡Que el Dios de María ampare a ambos!- y durmió para volver a casa, y Eiden volvió al descanso, mientras María lo esperaría, hasta el último momento de su vida.
Los meses pasaron y María cumplió 4 meses de embarazo y ya no había manera de seguir ocultándolo, Ana se daba cuenta, de que algo le pasaba a su hija y le preguntaba a María, pero esta no le decía nada, hasta que María volvió a escuchar al Espíritu Santo que le hablaba de parte del Creador, quien le dijo:
-María, habla con tu madre, por que tu estado pronto será visible y morirás por la ley de las adulteras, por haber traicionado a Joseph, o José, pon mucha atención en lo que has de decir;
Le dirás a tu madre y a Joseph que has concebido por obra y gracia del Espíritu Santo y mantendrás este dicho, firme ante quien sea, ya que es un mandamiento del altísimo Creador del cielo y de la tierra y así salvaras tu vida y la del hijo del Creador, quien es Jesuoh, el Creador te respaldara por que ya de antaño anuncio el nacimiento de el niño, a través de sus siervos los profetas, incluso yo fui utilizado por el Creador, para anunciar su nacimiento y lo que ha de venir de acuerdo a su plan, a través de los salmos, cuando estuve sobre la tierra, siendo el rey David, de tus antepasados por lo cual, el que ha sido el elegido para protegerte a ti, y al niño; Es descendiente mió, en cuanto a este mundo en el cual habitas, pero, el que dentro de el vive, es el Arcángel Miguel, quien es el soldado que siempre ha estado al cuidado, de los descendientes de Israel, el primogénito del Creador, este soldado ha sido apto para cuidarlos, así que no temas hablar con el, ya que su espíritu esta preparado para este momento y el Creador te respaldara mandándole a avisar por sueños, que te reciba, por que el niño que llevas en tu vientre es Voluntad del Rey y Creador que habita en las alturas.
Escucha bien, cuando el niño haya llegado a tu cuidado le pondrás por nombre “Enmanuel” cuyo significado es: “Dios con nosotros” ya que el Creador visitara a su pueblo a través de ese niño, pues será Enmanuel puro y sin mancha.-
María, llena de tristeza y viendo que no le quedaba otra alternativa, más que ir al lado de Joseph, hablo con su madre, y su madre no le creyó, la golpeo duramente, para después mandar por José y hacerla que le dijera aquello a el. María hablo diciendo:
-Perdóneme, yo se que es difícil que usted me crea, pero juro ante el Creador, que lo que voy a decir, es la verdad y es mandamiento de nuestro Dios que yo se lo diga;
El Creador me ha dicho, que usted es un elegido de el, para proteger a su hijo, el cual llegará a través de mi vientre, por que Dios ha decidido, enviar a su hijo, para que sea rey, y a través de su hijo, el Creador se manifestará a su pueblo.
Estoy en cinta y he concebido por obra del Espíritu Santo, y si usted me abandona sabe que moriré, por que nuestro Señor dice, que este pueblo es rebelde y no conoce la misericordia y conmigo dormirá el hijo del Creador.
José al escuchar aquello, se quedo pasmado, no entendía y a la vez, María estaba en cinta ¿Como era aquello posible? Y se preguntaba ¿Qué debía hacer el? y el conflicto entro en su alma, y así, llego la noche sin poder conciliar el sueño, por la angustia de aquellas palabras, sin embargo, el era temeroso de Dios y conocía las profecías, pero ¿Como el, podía ser el elegido para guiar al hijo del Creador? aquello era demasiado para su entendimiento carnal y ¿Como María, aquella simple jovencita sería la madre del que vendría a redimir a Israel?
Lo que sucedía era mucho para el, y decidió dejar a María. No sin antes orar al Creador y aquella noche, un enviado del Señor lo visito, como se le anuncio a María y le dijo:
- José, descendiente de David, el hijo del Rey de los cielos viene a la tierra, así que no temas desposar a María, por que lo que en ella es engendrado, voluntad del Creador es.-
Y mientras esto sucedía, María también estaba confundida y oraba al Padre, quizá si Publio regresara, pensaba ella, todo sería diferente.
Por la mañana, José visito a María, y le platico aquella visita en sueños, y como José sabía que el Creador habla en sueños, le dijo a María que se casaría con ella y sería un Padre para el hijo del altísimo, aunque en su corazón la duda lo atormentaba. Y sin dejar que el tiempo pasara más para que María no fuera difamada. Se casaron, no sin antes hablar aquello con los fariseos, quienes le aconsejaron que dejara a María, por que ellos no creyeron lo que María dijo, sin embargo, José le creyó al Creador por la naturaleza de su espíritu, por que sin recordar el nada, para eso había sido preparado aquel espíritu que lo avivaba, (el Arcángel Miguel), y en cuanto al linaje de su procedencia en carne. Descendiente de David y heredero al trono de aquel lugar, ese era José, un rey sin trono que vivía de la carpintería.
José y María se casaron y cuando María cumplió 7 meses de embarazo llego a la tierra a través de su vientre Jesuoh, en la tierra JESUS el ungido ò (Mesías). El tiempo pasó y María aunque callaba guardaba en su corazón la esperanza de ver un día a su amado Publio, quien no volvería, al menos en esa vida.
María se lleno de amargura viviendo su vida apagada y sin ilusión, a lado de un hombre que no amaba, pero que ahora era su marido y compañero. JESUS empezó a crecer y María no tuvo alternativa y se entrego a José y concibió en su vientre un nuevo ser, una hermosa niña llego a ser probada.
Y así Jesús ya tenía una hermanita menor, el tenía dos años y su hermanita era una recién nacida, su hermana se llamo Belén y después de 2 años más María concibió otra ves y esta ves le nació otra niña, era la tercera concepción de María y cuando cumplió esa pequeña dos años, le nació a Jesús su 4to hermano y cumpliendo este dos años, le nació el 5to. Hermano, en total con Jesús, María concibió 5 veces.
Jesús tuvo dos hermanos y dos hermanas menores que el, y efectivamente cuando María concibió a Jesús era virgen, y por orden del Creador María no dejo que José la tocara hasta que naciera Jesús, pues si la hubiese tocado durante el embarazo José se hubiese percatado de que María ya había sido “mujer de otro”, y la mente tan pequeña del ser humano no lo hubiese entendido.
Así como hasta este tiempo cuesta trabajo entender que si el Creador desde el principio coloco un útero en la mujer, es por que ahí debía encubarse el nuevo ser que llegaría a la tierra, y que si al varón le coloco la semilla en sus testículos para injertar el semen que uniéndose al ovulo de la mujer, harían un solo ser, formado de los dos es por que ese es el proceso normal, no tenía caso enviar a Jesús a través de un rayo divino, invalidando la función del hombre.
La Escritura nos aclara:
“El que niegue que Jesús vino en carne y sangre este es el espíritu del anticristo”
Ya que Jesús llego, de la misma manera que todos los humanos, tan es así, que El Creador cuando mando el diluvio, mostrándonos que así se debería llenar la tierra guardo la vida de Noé, y la de sus hijos para que se volviera a poblar la tierra, si el quisiera poblar la tierra con magia, destruye todo, y con un rayo divino pone nuevamente humanos en la tierra, situación que no es difícil para el, pero no lo quiso así, ya que el hombre perdería su utilidad. Pues el lo reemplazaría por un ser sin cuerpo humano, algo que es absurdo pensar pues no hay concepción humana si no se concibe en pareja y con cuerpos de carne y sangre, o a través de inseminación artificial en este tiempo, pero esto es algo que a el no le interesa, pues prefiere guardar a los que ve perfectos, para después de limpiar el lugar, de todo lo que no le sirve poner a los que se esforzaron, a iniciar un nuevo ir y venir. Ya que la tierra fue hecha para ser habitada, pues es el lugar para aprender la perfección.
Bueno, Jesús siguió creciendo y José estaba a su lado para cuidarlo, pero la labor de María era guiarlo a la obediencia y mostrarle lo oculto del Creador, y que Dios le habla al que quiere no a los que quieren que les hable.
Y lo hizo así, le platicaba constantemente todo lo que se le anuncio, antes de su nacimiento, que el era rey, y que para ser rey había nacido, le platico que el había nacido por obra y gracia del Espíritu del Santo. Jesús era muy inteligente, solitario y cuando llegó a la adolescencia el Creador comenzó a hablarle, el Padre mismo, empezó a tener comunicación con el, pero María no lo sabía.
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